Descubre el encanto natural de La Reserva del Arrayán, ubicada a menos de 1 km de la impresionante Playa Blanca. Sumérgete en un oasis de tranquilidad rodeado de exuberantes jardines y disfruta de una experiencia única en nuestro establecimiento, que combina comodidad, naturaleza y hospitalidad excepcional.
En La Reserva del Arrayán, te invitamos a disfrutar de un entorno sereno y relajante. Nuestro hermoso jardín te brinda un espacio para conectar con la naturaleza y disfrutar de momentos de paz y contemplación. Además, podrás deleitarte con una deliciosa variedad de platos en nuestro restaurante, que ofrece opciones culinarias que satisfacen todos los gustos.
Nuestros alojamientos están diseñados para brindarte el máximo confort durante tu estancia. Cada uno de ellos cuenta con un balcón privado donde podrás disfrutar de vistas panorámicas y relajarte al aire libre. Además, nuestras habitaciones están equipadas con comodidades modernas, como WiFi gratuita, para que puedas estar conectado en todo momento.
En La Reserva del Arrayán, nos esforzamos por ofrecerte una experiencia inolvidable. Nuestros alojamientos disponen de terraza privada, cocina completamente equipada con nevera y lavavajillas, y baño privado con ducha. Todo está pensado para que te sientas como en casa y disfrutes al máximo de tu estancia.
Comienza tus mañanas de la mejor manera con nuestro delicioso desayuno a la carta, que te ofrece una selección de opciones sabrosas y nutritivas para energizarte y prepararte para un día lleno de aventuras.
Explora los alrededores y descubre la belleza natural que nos rodea. El lago Tota se encuentra a tan solo 11 km de distancia, mientras que el emocionante parque temático Manoa está a solo 47 km. Estarás rodeado de oportunidades para explorar, disfrutar de actividades al aire libre y vivir momentos inolvidables.
En La Reserva del Arrayán, te esperamos con los brazos abiertos para brindarte una experiencia única en medio de la naturaleza. ¡Reserva ahora y comienza a crear recuerdos inolvidables en este paraíso en Tota, Boyacá!